Los bares y restaurantes han concluido la temporada de verano con un 5 % más de facturación respecto al mismo periodo de 2022, cifra que no supera las expectativas del sector hostelero y que responde a una contención en el gasto de los consumidores.Así se desprende de una encuesta realizada por la asociación Hostelería de España a sus establecimientos asociados: de ella, se extrae que para un 23,5 % de los encuestados la facturación ha sido mayor que la del año pasado, sin embargo, un 16,1 % asegura haber sufrido una caída de entre un 5 % y un 10 %.
En general, los hosteleros han calificado la temporada de verano como “buena”, especialmente en lo relativo a las visitas, con una gran afluencia de turistas, que han favorecido el incremento de la facturación respecto al año anterior.
Al detalle, el mes de agosto ha tenido un mejor comportamiento que julio, con mayor presencia de visitantes, aunque en ambos meses se ha mostrado una contención del consumo, ha precisado Hostelería de España.
El 42,3 % de los hosteleros ha apreciado un aumento del turista nacional, y la mitad de los encuestados incremento de los extranjeros, aunque el gasto de estos últimos ha sido mayor.
A diferencia de julio y agosto, el mes de junio ha sido el periodo en el que la hostelería ha registrado una mejor cifra de negocio, con un incremento del 9,8 % de la facturación, respecto al año anterior.
Los clientes gastan menos
Uno de los aspectos que ha resaltado la asociación de hosteleros es una mayor contención en el gasto, además, esta tendencia se aprecia especialmente en el cliente habitual y en el turista nacional.
No obstante, la organización ha apuntado a que el gasto de los extranjeros en la hostelería española sí ha aumentado; en total, el desembolso ha sido un 19,9 % superior al del mismo mes del año anterior.
En general, las expectativas del sector en cuanto a la evolución del consumo por zonas geográficas se han cumplido, con un incremento del mismo del 10 % en las zonas de la costa mediterránea, Galicia y las islas.
Mientras, en las regiones de interior se ha mantenido similar al año anterior y en el norte algo peor, debido a que el año anterior ya tuvieron “muy buenos resultados”, ha indicado la asociación.
Respecto al tipo de establecimientos, los restaurantes son los que muestran un mejor comportamiento, mientras en el ocio nocturno se redujo la actividad, debido a los cambios en la temporada estival.
También ha influido la asistencia a festivales al aire libre y la mayor proliferación de terrazas, resultando, según han apuntado, un cambio en el comportamiento de los usuarios.
Siguen con dificultades en contratación
Uno de los problemas que arrastra la hostelería y que sale evidencia con mayor intensidad en temporadas de alta ocupación y demanda, como el verano, es la búsqueda de personal para sus establecimientos.
En total, un 63,2 % de los hosteleros ha tenido, a juicio de Hostelería de España, dificultades a la hora de encontrar trabajadores este verano
A este problema se unen los “elevados costes de producción”, especialmente de los alimentos y bebidas, que suponen un descenso de la rentabilidad de los negocios.
Previsiones para el final del año
Las previsiones que maneja Hostelería de España para el último trimestre del año muestran “signos de debilidad”, provocados por la contención en el gasto que se ha mostrado durante el verano.
A partir de septiembre, con el final del verano y la vuelta de las vacaciones, se puede “acentuar” un descenso en el consumo de la hostelería, debido al descenso de la capacidad de ahorro de las familias.
Para el cierre del año, los hoteleros prevén una caída de hasta un 5 % respecto al año anterior, teniendo en cuenta que los mismos meses de 2022 mostraron muy buen comportamiento, con recuperación de las cifras de 2019.
Fuente: Efe:Agro